Capitulo 25

Cuenta Pedro.. 


Otra vez dejaba a mi hija con Pau, y algunos podrán decirme que no la conocía lo suficiente para dejar a mi hija con ella, pero yo estaba seguro que Pau la cuidaría perfectamente, se nota a kilometros de distancia el cariño que le tiene a mi pequeña, y eso me hacía sentir más seguro. Llegué a la empresa y otra vez era un caos. Por suerte el viernes acababa la temporada de contratos y publicidades nuevas. Estaría todo un poco más tranquilo. Luego de unas cuantas reuniones me acerqué al escritorio de Isa.


Pedro: Buenas tardes señorita-dije riendo mientras la saludaba con un beso.


Isabella: Hola pepe-mientras respondia a mi saludo- Todo bien?


Pedro: Cansado de firmar-reí.


Isabella: Y la gordita?


Pedro: Se quedó con Pau


Isabella: Mirá que bien, sino se aburre mucho acá.


Pedro: Eso me dijo ella, no veo la hora de poder tomarme unas vacaciones asi la llevo a algún lado.


Isabella: La playita a la que fuimos el año pasado le encantó. Hay mucha paz.


Pedro: Si, me parece que la voy a llevar aunque sea un fin de semana. Vamos a tomar algo? Tengo un break de 15.


Isabella: Perfecto, vamos.


Tomé un café en el bar de la empresa con Isa y volví a mi oficina a continuar con mi trabajo. Terminé cerca de las 20:30, como tenía pensado fui a casa a cambiarme y pasé a buscar a Juana y Paula. Viajamos en auto hasta la costanera, donde bajamos y Juana, que iba en el medio nos agarro de las manos. Caminamos hasta el restaurant en el que cenaríamos y pedimos la comida. 


Pedro: Como la pasaron hoy ? 


Juana: Bien papi,  jugamos muchisimo y Pau me hizo una chocolatada riquisima-contenta


Paula: Y Juani hizo unos dibujitos hermosos no  mi amor ? 


Juana: Si! Uno es para vos papi.


Pedro: Gracias mi vida, después me lo mostras si ?


Juanita asintió.


 Luego de comer, fuimos a caminar. En un momento se acercó un chico vendiendo rosas. La miré a Juani y ella me dijo.


Juana: Podemos comprar una para Pau papi ? -en el oído


Obviamente le hice caso a mi hija, y compré dos rosas, una se la regaló Juani y la otra yo.


Paula: Gracias-me dijo tierna.


Pedro: Te lo mereces-dije dandole un beso en la mejilla.